¿Asesoría?...

De qué hablamos cuando hablamos de aprendizaje activo

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El aprendizaje activo representa un cambio significativo en la forma en que concebimos la educación. Así lo hemos entendido en el Gimnasio del Norte.

Comprendimos, también, que al adoptar este enfoque estamos promoviendo, no solo la adquisición de conocimientos, sino también el desarrollo de habilidades cognitivas y socioemocionales de nuestros estudiantes. 

En este modelo, el docente —como facilitador— y el estudiante —como protagonista, trabajan juntos para construir un entorno educativo que fomente el pensamiento crítico, la colaboración y la autodirección.

Pero ahondemos en qué es eso del aprendizaje activo.

Beneficios del aprendizaje activo      

El aprendizaje activo se ha consolidado como un enfoque pedagógico que busca involucrar a los estudiantes de manera directa en su propio proceso de aprendizaje. La idea de que haya un docente de tiza y tablero “impartiendo” conocimiento ha quedado atrás. 

Por eso este método va más allá de la tradicional transmisión de conocimientos y fomenta la participación activa de los estudiantes, convirtiéndolos en protagonistas de su educación.

Cómo se aplica el aprendizaje activo

Aquí es donde radica el verdadero reto y en Colegio Gimnorte de Valledupar estamos más que comprometidos y hemos dado el paso que nos permite aplicar un modelo que permite a los estudiantes sacar lo mejor de sí mismos. 

El aprendizaje activo implica una transformación en la dinámica de educación. ¿Qué significa esto? En lugar de ser receptores pasivos de información, los estudiantes participan en actividades que promueven la reflexión, el análisis, la investigación  y la aplicación de conceptos. Esto puede lograrse a través de discusiones en grupo, proyectos colaborativos, resolución de problemas y otras estrategias que desafíen la mente del estudiante y eso es, precisamente, lo que hacemos en el Gimnasio del Norte Valledupar.

Cinco ejemplos de aprendizaje activo en las aulas

¿Cómo se puede ver la aplicación del aprendizaje activo en las aulas del Colegio Gimnasio del Norte? Estos son unos ejemplos de ello:

 

 

El rol del docente en el aprendizaje activo

Lo dijimos antes: el profesor que se vale solo de la tiza y el tablero está dejando por fuera del proceso educativo buena parte de las competencias intelectuales y sociales de los estudiantes. Se necesita un docente diferente, con el conocimiento amplio de los temas, pero también movilizador y provocador para despertar la inquietud de los estudiantes.

En el contexto del aprendizaje activo, el docente asume un papel de facilitador. Su función principal es crear un entorno propicio para el intercambio de ideas, la exploración y la construcción conjunta del conocimiento. Más que ser el transmisor exclusivo de información, el docente guía, motiva y brinda orientación, fomentando el pensamiento independiente y el descubrimiento.

El rol del estudiante en el aprendizaje activo

Si los profesores que exigen el aprendizaje activo deben tener nuevas competencias, el estudiante también se ve enfrentado a una manera de aprender que le exigirá más participación, porque en este enfoque, el estudiante se convierte en el centro del proceso educativo. 

Su papel es participar activamente, cuestionar, explorar y construir su comprensión del tema. Los estudiantes, entonces, son también partícipes del proceso y deben aprender a gestionar su aprendizaje. De esta manera se promueve la autonomía y el desarrollo de habilidades metacognitivas, lo que no significa que estén solos en su proceso educativo. El docente los acompañará y guiará por ese camino de descubrimiento.

Así, esa suma de nuevos roles y entendimientos entre el colegio, los profesores y los estudiantes, es lo que hace posible que la formación en el Colegio Gimnasio del Norte Valledupar impacte con mayor fuerza en todo el proceso educativo.

¿Te interesa conocer más de cerca cómo lo hacemos?

 

 

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